La Conferencia programada dentro del XV ciclo de conferencias de la Asociación Cultural "Soledad del Puente" este año corría a cargo del joven conquense Adrián López Álvarez. debido a que Dña. Paloma Gómez Borrero, Pregonera de esta Semana Santa en Cuenca, no ha podido asistir debido a sus múltiples compromisos en Roma y en el Vaticano durante la Cuaresma. 

 

De este modo, Adrián ha pasado a engrosar el elenco de personas que han tenido el honor de pronunciar una Conferencia sobre un tema relacionado con la Semana Santa de Cuenca. En esta ocasión, Adrián se dirigía a los asistentes para tratar de explicar la evolución llevada a cabo en la Hermandad para vestir a su Sagrada Imagen, La Virgen de la Soledad del Puente.

 

Remontándose hasta el mismo origen de la Semana Santa, en el siglo XVI, explicaba cómo surgió la costumbre de vestir a las dolorosas y el atuendo de luto que todas las imágenes de este tipo llevaron durante siglos. Reveló también la forma en que este traje de viuda fue cambiando desde finales del siglo XIX ; cambios que llegarían a Cuenca a partir de 1940 y que influirían directamente en nuestra estética procesional. Finalmente, realizó un interesante recorrido por la trayectoria estética de la Hermandad desde 1940 hasta la actualidad, centrándose en la vestimenta de la Imagen Titular y en cómo las influencias llegadas desde el sur, una vez adaptadas a la sensibilidad típicamente conquense, han ido forjando nuestro estilo.

 

Adrián finalmente resaltó que "nuestro estilo no está todavía bien definido ni completamente cerrado porque hasta ahora cada etapa ha ido borrando a la anterior. Y el estilo de una Hermandad centenaria como la nuestra debe reflejar toda su trayectoria, toda su historia. Hay etapas importantísimas de nuestra historia estética que permanecen en el olvido, y que hay que recuperar, siempre manteniendo el estilo clásico y la identidad que hemos ganado con el tiempo. A eso no debemos renunciar nunca". En este sentido, Adrián abogó por la recuperación de partes de nuestro patrimonio, como las sayas granates, o el uso del color blanco para esta misma prenda, aunque siempre recalcó que hay que mantenerse fieles a la personalidad estética que se ha ganado con el tiempo.